BY AIR MAIL
CONFIDENCIAL
DESPACHO N0.92
EMBAJADA BRITANICA
BUENOS AIRES
FINAL DE JUNIO 1950
Sir,
1. Tengo el honor de comunicarle que el 27 de mayo, en compañía del Vice-Presidente, los miembros del Gabinete argentino y de la Corte Suprema y un gran número de otros altos cargos militares y civiles, asistí a un almuerzo dado por el Presidente y la Señora Perón a bordo del barco "Eva Perón" recién llegado a Buenos Aires de su primer travesía.
2. Adjunto extracto del Buenos Aires Herald del 28 de mayo donde, en su discurso final del banquete, el Presidente "dio las gracias a Gran Bretaña que, aunque sabiendo que estaba trabajando para un competidor, nos fabrica barcos tan bien acabados y espléndidos como éste que acabamos de recibir". En el curso de sus comentarios señaló que la decisión de su gobierno de adquirir una flota mercante había sido muy inspirada al considerar que en otra guerra, que él creía aproximarse, Argentina podría así evitar las consecuencias de un asedio.
3. El principal interés del banquete fue el estar al lado de la Señora Perón con la que pude hablar durante bastante tiempo. Como su conducta y personalidad ejercen un efecto tan profundo en la evolución de su país, pensé que era correcto a pesar del riesgo de parecer superficial, incluir un informe de lo que sucedía.
4. La adulación de los seguidores, las lenguas de los aduladores y los aplausos del populacho ha corroído casi siempre la mente y el corazón de reglas autocríticas. El carácter del Presidente Perón, ejemplificado por su intensa autocomplacencia traspasó su discurso de inauguración del Congreso y queda recogido en mi despacho NO.78 del 2 de mayo. Desafortunadamente no parece ofrecer una excepción a esta regla.
5. En el caso de la Señora Perón están presentes todos los síntomas de una fatal auto-preocupación. Aunque es cierto que ella es la fuerza motriz de las actividades nacionales, no sólo sociológicamente sino también en otros campos importantes, parece estar autopersuadida de que ella no es más que la incansable doncella de su marido. Cualquier cosa que se pueda decir en su detrimento en otros aspectos, es también verdad que la Señora Perón ha sido responsable de hacer del bienestar de los trabajadores la principal preocupación del Estado. Gracias a sus actividades, que bajo el punto de vista de la publicidad que recibe, corre paralela y a veces eclipsa a la del Presidente, el estatus de las hasta ahora masas desamparadas en la comunidad, ahora parece el preludio de un regreso a las actitudes de "dejar hacer" de los primeros gobiernos argentinos.
6. Sus indudables logros y su pretendida humildad eran contrarrestados e invalidados por otras consideraciones. Pródigos gastos y propaganda demagógica con el ojo puesto en la recogida de votos, gratuita concesión de favores sin el correspondiente intento de inculcar en los receptores un sentido de responsabilidad cívica, llamadas vindicativas a la clase odiada, el crecimiento de la corrupción entre los burócratas, el enriquecimiento de personas en puestos elevados por motivos dudosos y sobre todo la proyección de la política nacional con técnicas de vodevil, por no decir, pantomima, por una mujer que hasta su encuentro con Perón, no había tenido otro conocimiento de la vida pública más que el obtenido siendo una actriz menor o estrella de cine. Todo esto ha conferido a los hechos de la señora y de sus numerosos satélites un aire de autointerés y extravagante frivolidad que es de mal agüero para el futuro.
7. Argentina es un país latino americano adolescente y su adolescencia es vanagloriosa, autoafirmativa, con una vanidad nacional infantil. En este sentido, la técnica de vodevil de la señora, su propia personificación de adolescente latino americana, ejerce una poderosa atracción emocional hacia los numerosos sectores de compatriotas que ella tiene, como si hubiera sido ascendida del pozo al escaño o como si tuviera un privilegio no acostumbrado en el establo. No obstante, a pesar del éxito espectacular que la primera actriz ha logrado con sus antiguos mosqueteros, su propia representación, incluso también la del compañero presidencial a quien ella debe su carrera, es como si durara tanto que las entradas se pudieran adquirir en la taquilla oficial a precios populares. Por así decirlo, hay algo como de ensueño y atemporal en todo esta engañosa puesta en escena. En palabras del ensayo de Bacon en el tema “The Great Place": "Los hombres de grandes fortunas son en verdad estranjeros para sí mismos y mientras están en el puzzle de los negocios, no tienen tiempo para cuidar su salud, ni su cuerpo ni su mente.
8. Le mando una copia de este despacho y sus documentos adjuntos al Honorable Embajador en Washington.
Con el mayor respeto, su más obediente y humilde servidor
John Balfour
Al muy honorable,
Ernest Bevin, M.P.
Foreign Office,
London
Despacho de dos páginas perteneciente a los archivos secretos hechos públicos recientemente. Se trata del despacho número 92 escrito por Sir John Balfour, embajador británico en Buenos Aires en 1950, dirigido a Ernest Bevin del
Foreign Office en Londres. Parte de esta carta es usada en el artículo escrito por Neil Tweedie
Introducción
Eva Duarte 1919-1943
Eva Perón 1944-1947
Evita 1947-1952
Cronología básica
Eva Duarte de Perón
Retrato de Eva Perón
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