La Vanguardia empezó a dar las noticias de la llegada de Eva Perón a España desde el Domingo 8 de junio de 1947 que empezó con esta noticia:
El viaje a España de la esposa del Presidente de la Argentina
Ayer sábado, la ilustre dama llegó a Villa Cisneros donde fue recibida, en representación del Jefe del Estado y del Gobierno, por el ministro de Asuntos Exteriores.
Bienvenida a la Primera dama del Plata
En el momento de publicar estas lineas ya habrá pisado tierra española, aunque no pertenezca propiamente a la geografía peninsular, la excelentísima señora doña Eva Duarte de Perón, esposa del presidente de la República del Plata y, por consiguiente, primera dama arqentina. Coincidiendo con este hecho, que llena de gozo a España entera, lanzamos al aire nuestra más caballeresca y emocionada salutación de bienvenida a la ilustre dama y a las personalidades de su séquito.
No sólo les deseamos que la estancia en España les sea grata: les deseamos también que les resulte inolvidable, y abrigamos la seguridad de que así ha de ser, pues tenemos pulsado, en nuestro quehacer periodístico el clima que envuelve a esa visita, en la cual, aunque la cortesia ha de trenzar innúmeras gentilezas, el afecto de los españoles en masa pondrá su nota más destacada y elocuente.
El gesto del general don Juan Perón al enviarnos como embajadora eminente de la querida nación argentina a le compañera de su vida, que lo ha sido de sus luchas y lo es de sus duros y nobles afanes, empeñados en la salvación del prestigio, del crédito y de la riqueza de su país nos conmueve en lo más profundo del ser. España corresponderá complacida al desarrollo de los actos que oomponen el programa elaborado con motivo de la estancia de tan ilustre visitante, a la cordialidad extrema puesta en el rasgo del gran Presidente argentino, cuyo corazón, en la persona de su esposa, ha cruzado el océano para remansarse en estas antiguas tierras del solar hispano, del cual proceden las mejores estirpes americanas, que de aquí arranca, la sangre y, lo que tiene todavía más valar, el pensamiento.
No es preciso poner de relieve que el fino espíritu de doña Eva Duarte captará certeramente el alma entera de España flotando en el ambiente en que durante unos días ha de vivir junto a nosotros. Sin necesidad de alharacas extraordinarias, la solera popular de España envolverá a las gentes y escenarios entre los cuales va a moverse la primera dama argentina, cuyo visita a Europa tiene como único afán pisar la tierra madre de España, que latirá de contento al ser pisada por la gentil señora, que trae consigo no sólo una alta representación oficial, sino el impulso del amado pueblo argentino, que ha volado en ímpetu viajero, nostálgico de España, junto al avión que nos ha traído a la esposa del ilustre general Perón.
El pueblo fino y sensible de España dejará sentir su personalidad inconfundible cerca de la esposa del general Perón, a la que halagará con sensaciones cálidas de simpatía, de comprensión y de aliento. Mientras volaba hacia nosotros, doña Eva Duarte habrá ya percibido el aura magnética que la envolvía y la atraía hacia la progenie de sus mayores; habrá tenido el pálpito, superior a cuantas informaciones haya recibido anticipadamente, de que se la esperaba con desbordante cariño y explícita simpatía por sus propios méritos, por los de su ilustre esposo y por los que atesora el noble pueblo argentino.
Bienvenida sea, pues, a España la excelentísima señora doña Eva Duarte de Perón. Hallará en nosotros a un pueblo unido, percatado de su personalidad y de sus problemas, entero frente a los enemigos y rendido a las solicitaciones y a los servicios de la amistad; un pueblo tan parecido al suyo, especialmente en la coyuntura presente que por su sola presencia, de no decírselo ya su propio corazón, la diría que tiene con la Argentina una comunidad de pensamiento y de ideales que nada ni nadie pueden disolver nl aventar.
Como los lunes no se publicaba LA VANGUARDIA en aquella época, la siguiente publicación fue realizada el domingo 10 de junio de 1947.
La Vanguardia del martes 10 de junio de 1947
Vanguardia número 25.194 del martes 10 de junio de 1947 que recoge en la portada las fotos de la llegada de Eva Perón a España. El texto, que en la imágen no se puede leer dice:
En estas tres notas gráficas reproducimos el momento en que la Excma. señora doña María Eva Duarte de Perón, acompañada del ministro de Asuntos Exteriores, señor Martín Artajo, desciende del avión en el aeródromo de Barajas. El Generalísimo Franco, acompañado de su esposa e hija, da la bienvenida a la ilustre viajera, y la señora del Presidente argentino, en coche descubierto y acompañada por su Excelencia el Jefe del Estado, saluda a la multitud, que la aclama a su paso por la Gran Vía madrileña. (Fotos. Cifra).
JUNIO 10 .- La llegada de la ilustre dama doña María Eva Duarte de Perón, ayer domingo, constituyó una imponente manifestación madrileña. Dos horas antes de la anunciada para la llegada del avión que conducía a la esposa del Presidente de la República Argentina comenzó a congregarse en el aeropuerto de Barajas una gran multitud, que afluía al campo de aviación en larguísimas caravanas de automóviles y utilizando otros diversos medios de locomoción.
Franco recibe a Evita
El Caudillo de España se destacó al encuentro de la ilustre viajera. S. E. El Jefe del Estado se emocionó visiblemente al besar la mano de la ilustre embajadora especial que la Argentina envía a España.
Una multitud sin medida posible invadía la Plaza de Oriente y la de la Armería y calles de Carlos IV, Felipe III y Bailén, desde el Viaducto hasta la Plaza de España, más de medio millón de personas portando banderas de los dos pueblos o levantando simplemente pañuelos blancos, acogieron la presencia del Caudillo y de la dama ilustre.
Introducción
Eva Duarte 1919-1943
Eva Perón 1944-1947
Evita 1947-1952
Cronología básica
Eva Duarte de Perón
Retrato de Eva Perón
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Esta página está dedicada a mi esposa Dolors Cabrera Guillén, fallecida por cáncer el día 12 de marzo de 2007 a las 18.50 y por seguir su última voluntad, ya que conociéndome, antes de morir, me hizo prometerle que no abandonaría la realización de mis páginas web.
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