DOCUMENTOS SOBRE EVA DUARTE DE PERON


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María Eva Duarte de Perón / Evita. Argentina 1919-1952

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REVISTA O CRUZEIRO

Revista O CRUZEIRO

Detalle de la portada

O CRUZEIRO AÑO XXIV Nº31. Revista brasileña publicada en Río de Janeiro el 17 de mayo de 1952. Contiene un artículo titulado "Los últimos días de Eva Perón" escrito por Jorge Ferreira con varias fotografías de Nicolau Leite y del archivo de la revista O CRUZEIRO.

Debido al gran número de fotografías del reportaje de esta revista y para facilitar la carga de las páginas, haciendo clic en la imagen de la portada en color, podrás acceder de manera sucesiva a las diferentes imágenes. A causa del gran tamaño de la revista, hemos reproducido un detalle de la portada y a continuación traducimos del portugués el artículo de Jorge Ferreira:

REVISTA O CRUZEIRO

Los últimas días de Eva Perón

BUENOS AIRES, mayo

Los días de Eva duarte de Perón están contados. El cáncer corroe sistemática ye impiadosamente el joven organismo de esta mujer que usó dos camerinos para proyectarse en la Historia de la República Argentina. Sus carnes menguan, su semblante no presenta aquella vivacidad contagiosa, el espíritu no revela más disposición para la lucha y en el rostro apenas quedan trazos de una belleza que no fue vulgar y ya deja de ser rostro para transformarse en máscara. La muerte de Evita es lamentable y compungida, condenada a los treinta y un años de edad. Mal se podrá creer que fue ella uno de los sustentos de la dictadura peronista cuyo destino está tan íntimamente ligado al suyo: agoniza como su inspiradora.

Se tiene como cierto que a su muerte, prevista para los próximos meses, marcará un fin del régimen caprichoso implantado en el Plata hace ocho años.. Parece que el pueblo argentino, lleno de un sentimiento de compasión, respeta los últimos días de la moribunda "descamisada". Una revolución irreprimible y se recoge y no desenvaina la espada para no herir a un cadáver. Son caprichos históricos que un día tendrán intérpretes y exegetas. Se dirá entonces si el levantamiento fue humano o se esperó por un momento psicológico. Lo que la actualidad nos muestra, en toda su crudeza, es una tragedia inevitable invadiendo los rincones más íntimos de la Casa Rosada y Evita inevitablemente presa en las garras de una dolencia incurable, cuya acción violenta espera su punto culminante.; es una tragedia saltando de la alcoba para avalar un régimen.

ROMANCE Y POLITICA

Fue la casualidad lo que unió a Evita y Perón. Ella, una actriz mediocre; él, un simple capitán y viudo. Se conocieron y se amaron apasionadamente. Eran amantes cuando la revolución colocó al Coronel Juan Domingo Perón en el poder. Entonces fue preciso legalizar esa unión, siendo que en ese momento estaba dictada por el afecto. Evita fue elevada a la posición de primera dama argentina. Surgió y se reveló como una política de rara fibra y visión. Ocupó, casi en un plano de igualdad, la dirección de la orquesta. Provocó una revolución conquistando el derecho del sufragio femenino. Se avocó febrilmente a las realizaciones sociales que, de aspecto y contenidos demagógicos, fueron construyendo las bases de la dictadura. Se convirtió de hecho en la líder de los "descamisados" y su influencia en la C.G.T. argentina que congrega a más de seis millones de miembros es decisiva y actuante.

CON DUTRO. En la inauguración del Puente Internacional del Paso de los Libres. Se encontraba en su apogeo Acompañando y promoviendo una política de carácter personal propia de los señores de las regímenes caprichosos, levanta ciudades, fundaciones, lanza campañas, movimientos, construye escuelas y hospitales, todo con su nombre. Vasta bibliografía rodada a expensas oficiales hacia su endiosamiento, el país se cubrió de propaganda aduladora cantando en prosa y en verso sus hechos. Distribuía favores, daba limosnas, hacía caridad pública. Dividió con precisión el reinado de su marido. En poco tiempo su nombre andó por los cuatro costados del mundo.

Parte hacia Europa como verdadera embajadora, cargando 52 maletas con ropa, mata el hambre en España, es recibida ruidosamente en París y también la recibe el Papa. Y Perón comprando con dinero argentino toda la publicidad. Evita, "amada de los pobres", pasó a ser una mujer destacada en el terreno político de las tres Américas.

En las últimas elecciones "libres" de Argentina, hubiera sido elevada al puesto de la vicepresidencia si no hubiera tenido la oposición del ejército. Pero si Eva no podía, por derecho, compartir las más altas responsabilidades gubernamentales, de hecho ella era una vicepresidenta, más aún, era el segundo presidente de la República.

Jamás se levantó un obstáculo a sus deseos. Nunca fue ofuscada su parda eminencia. Nombraba y quitaba ministros, participaba en las conferencias nacionales e internacionales, planificaba, ejecutaba, determinaba. Ay de aquel que le cayera en desgracia. Conocí, aquí, hombres ilustres que ocuparon cargos elevados y que al perder las simpatías de la "señora" fueron lanzados a la más negra de las miserias. Uno de ellos, ex-embajador, gana hoy 800 pesos mensuales en un empleo privado sin ninguna oportunidad de mejora.

Por otro lado, Evita favoreció a muchos. Un caso típico es su hermano Juan Duarte, hoy poseedor de una de las más respetables fortunas del Plata. Venido de la nada, ganó millones y millones en su calidad de "cuñado de la República". Es que Eva también encubrió negocios de amigos y parientes, posibilitando grandes "blanqueos", abrió las puertas de la fortuna a los apadrinados, todo ello según la dependencia directa de sus preferencias personales.

ECLIPSE

A mediados del año pasado la estrella de Evita comenzó a empalidecer. Ella ya no se sentía la misma mujer, adelgazada de forma que asustaba, las fuerzas le fueron desapareciendo. Los rumores empezaron a invadir Argentina, venidos soterráneamente de fuera, porque interiormente no se podía decir nada sobre la salud de la Sra. Perón. Los rumores eran lo más contradictorios posibles. Se hablaba mucho pero se sabía poco. En la Casa rosada se hacía lo posible y lo imposible para ocultar con sigilo su estado. En septiembre dejó de aparecer en público, apartándose de cualquier actividad. Para dar una satisfacción al pueblo, se emitían comunicados oficiales avanzando que se encontraba con una ligera dolencia, pero que no había por qué preocuparse.

En octubre empeoró extraordinariamente y el gobierno mandó un emisario especial a New York, solicitando los oficios del Dr. George Pack. No era posible continuar guardando el secreto, por lo menos en el exterior,; el Dr. Pack es una de las más renombradas autoridades médicas en el terreno de la cancerología. En noviembre fue a Buenos Aires y operó a Evita cuyo estado se consideraba desesperado. Se le vio una metástasis y las esperanzas de una cura radical estaban completamente extinguidas. Se le detectó cáncer en la matriz. En intervenciones sucesivas se le extrajeron los ovarios, el útero y parte de los intestinos. Cada quince días el Dr. Pack hacía el viaje New York-Buenos Aires para examinar a su paciente, que hoy por hoy pesa cerca de cuarenta kilos. Nos quedamos estremecidas y paralizados cuando la vimos. Apenas puede sostenerse en pie. La voz está sumida en su cuerpo excesivamente atormentado. Sobre su cabeza no deja de oscilar la espada de Damocles: ni toda la ciencia médica unida podría salvarla. Es una condenada sin derecho de apelación.

Pero a pesar de todo ella busca sus últimas fuerzas para luchar. Es una mujer de fibra, no se le puede negar pese a toda la discordancia doctrinaria. No seremos nosotros, demócratas convictos y sinceros los que vamos a quitarle mérito. "Lucharé hasta el fin", nos dijo, "para conseguir la felicidad del pueblo argentino. No hay fuerza a no ser la de dios que me pueda arrancar de la primera línea de batalla. En Perón y en su régimen reside la grandeza del destino de nuestra Patria".

Es como si volviéndose hacia sí misma, encarando su cuerpo corroído e indefenso, la co-directora de la Orquesta "descamisada" concluye:

"La muerte me encontrará de pie, con las armas en las manos".

Será el fin de una comedia o de una tragedia. (Fin del artículo).

Esta página se ha podido realizar gracias a la colaboración de María Cristina de Porto Alegre-Estado do Rio Grande do Sul- República Federativa do Brasil que me ha enviado esta revista y que yo he recibido, dadas las fechas, como un regalo navideño 2002-2003.



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Esta página está dedicada a mi esposa Dolors Cabrera Guillén, fallecida por cáncer el día 12 de marzo de 2007 a las 18.50 y por seguir su última voluntad, ya que conociéndome, antes de morir, me hizo prometerle que no abandonaría la realización de mis páginas web.

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